Viernes 1ro de mayo de 2009

5 GENOCIDAS A JUICIO EN CAMPO DE MAYO

La coronación del discurso K sobre los Derechos Humanos

El lunes 27 de abril comenzó el juicio oral por la primera causa dentro de la mega-causa Campo de Mayo, por el secuestro y asesinato del militante juvenil Floreal Edgardo Avellaneda y por el secuestro y torturas a Iris, su madre. El “Negrito”, como lo llamaban, tenía sólo 15 años y militaba en la Federación Juvenil Comunista cuando fue secuestrado junto a su madre en el domicilio

El lunes 27 de abril comenzó el juicio oral por la primera causa dentro de la mega-causa Campo de Mayo, por el secuestro y asesinato del militante juvenil Floreal Edgardo Avellaneda y por el secuestro y torturas a Iris, su madre. El “Negrito”, como lo llamaban, tenía sólo 15 años y militaba en la Federación Juvenil Comunista cuando fue secuestrado junto a su madre en el domicilio. Fueron interrogados en la Comisaría de Villa Martelli y su destino fue Campo de Mayo. Su cuerpo fue hallado el 14 de mayo de 1976 en las costas de Montevideo. En esta causa, iniciada a la salida de la dictadura, estuvieron sentados en el banquillo de los acusados seis genocidas: Santiago Omar Riveros, uno de los jefes máximos de la dictadura de la zona-autoridad superior de Institutos Militares de Campo de Mayo e integrante de la Junta Interamericana de Defensa, Verplaetsen, jefe del Area de Inteligencia 2 de Institutos Militares y más tarde jefe de la Policía Bonaerense durante los últimos años de la dictadura, los oficiales Raúl Horacio Harsich y César Amadeo Fragni, el director de la Escuela de Infantería Osvaldo Jorge García, y Alberto Ángel Aneto, que revistaba en la comisaría de Villa Martelli. ¡En la audiencia tuvimos que escuchar a la defensa planteando que las audiencias no duraran más de 6 horas porque los pobres viejitos habían sido trasladados durante toda la noche! Encima agregaron que eran personas con problemas de salud, por lo cual pedían que se enviaran las historias clínicas del Hospital Militar al Servicio Penitenciario para continuar con los cuidados necesarios.

Parecía una cargada. Todo el mundo sabe que están en cárceles de privilegio y tienen cuidados que ningún otro preso tiene en este país. Pero lo insólito es que sean sólo seis genocidas los acusados, cuando Campo de Mayo fue uno de los Centros Clandestinos más grande de la dictadura y donde fueron llevados alrededor de 5.000 detenidos desaparecidos, entre ellos luchadores y militantes de la zona como los trabajadores y delegados de Astarsa, Fate, Terrabusi, Fiat, Alpargatas, Banco Nación, Hipotecario, junto a los estudiantes que se organizaban como Floreal para luchar contra la dictadura y subvertir la realidad.

Mientras existen 400 hijos de desaparecidos que no conocen su identidad y en Campo de Mayo funcionaba una de las maternidades clandestinas más grandes del país, hoy se enjuicia sólo a seis. La presidenta K habla de derechos humanos, pero deja impunes a los milicos asesinos y torturadores de las mujeres que fueron el 33% de los desaparecidos, mientras el predio sigue en manos del Ejército que conspira contra los trabajadores y el pueblo pobre como lo hacían en los ´70 junto a las empresas y las burocracias sindicales con las conocidas listas negras. Luis Bonomi, abogado del CeProDH, estuvo en la querella de los organismos que nos agrupamos en Justicia Ya!, los que sostenemos nuestro desacuerdo con estos juicios parcializados que reproducen y son funcionales a la impunidad, ya que así se diluyen las responsabilidades, se ignora el carácter masivo, planificado y organizado de la represión y se pretende poner en cabeza de unos pocos la responsabilidad del genocidio. Impunidad que nos lleva a que hoy miles de personas deban atravesar cotidianamente este campo de exterminio para concurrir a sus trabajos y lugares de estudio mientras el 95% de los genocidas siguen en libertad. La impunidad se muestra viva y obscena cuando los jóvenes salen a divertirse y deben sufrir la persecución y la violencia de los llamados “cabeza rapada”, cuando las jóvenes son acosadas y violadas por los integrantes de estas fuerzas que se encuentran protegidos dentro de Campo de Mayo, desde los´70 es así. No lo podemos permitir. Desde el CeProDH-Zona Norte participamos de la audiencia, y nos manifestamos en la puerta del tribunal exigiendo por nuestros 30.000 desaparecidos. Juicio y castigo a todos los culpables del plan genocida. Cárcel común para los responsables del asesinato y tortura del Negrito y secuestro y tortura de Iris. Apertura de los archivos de la dictadura ya. Restitución de la identidad de los 400 hijos apropiados. Aparición con vida de Jorge Julio López. Aparición con vida de Luciano Arruga.